No tenía pensado hablar de mi ciudad, pero últimos acontecimientos me van a obligar a ello.
Uno de ellos es esta gigantesca cola de autobuses urbanos que se montó en el centro de Vigo hace unas semanas.
Esto fué provocado porque el señor alcalde quiso cortar al tráfico las cinco calles principales del centro: El Paseo de Alfonso XII, Elduayen, Puerta del Sol, Policarpo Sanz y un trozo de García Barbón. El primer día empezaron a funcionar mas o menos las cosas hasta las dos de la tarde. Cuando los policías que vigilaban el tráfico se fueron, la zona quedó desvigilada y se montó la que se montó. ¿Os imaginais la escena?. Cientos de personas hambrientas atrapadas en una caravana sin fin.
Esta es una de las principales gilipolleces de nuestro alcalde. Eso y las humanizaciones sin sentido, como las de las Calles del Esperanto y la Travesía del Pino, callejones sin ninguna importancia para la gente.
Pero dentro de nada viene la estrella. Humanización de la Plaza de España. 6 años de obras y un previsible atasco que va a colapsar las pocas calles colindantes como Padre Feijoo o Honduras.
Y a la gente parece que ni le importa. Parece que esto es soportable. Y desde luego, yo me empiezo a hartar de los atascos y de que los autobuses lleguen siempre tarde.
Publicado previamente en Libertad antiPSOE
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En verano quedarse en la ciudad, es una faena, todo son obras y molestias, para los que nos quedamos (por trabajo).
ResponderEliminarDe todos modos ten animo, todo pasa incluido tu alcalde, saludos.